miércoles, 13 de abril de 2011

Como Irse de Campamento

Soy de aquellas personas a las que le gusta pasar un par de días en lo profundo de algún bosque, a orillas de algún lago, y por suerte a mis amigos también, así que después de algunos campamentos compartidos con ellos me animo a contarles más o menos como es la “receta” para irse de campamento exitosamente.

Los mortales comunes suelen confundir un campamento con otras actividades, pero que claro, no lo son, por ejemplo, irse por una noche a un camping que esta más limpio y ordenado que cualquier jardín de una casa, con poste de luz y conexión a 220, (hago esta descripción porque hay campings que son bastante agradables manteniendo el estilo agreste) a tirar unas patys a la parrilla y chuparse una montaña de alcohol, eso erróneamente suele llamarse campamento, eso es… ir a embriagarse al campo. Algo similar, similar en cuanto a que no es un campamento, es irse a dormir en cabaña, todo aventurero de corazón sabe que como mucho se duerme en carpa, y esta debe tener ciertas características que detallaré más adelante.

Sin mas preámbulo comienzo a presentarles la lista de ingredientes elaborados (es decir, cada ingrediente tiene ingredientes a su vez, por eso es elaborado, que podrido que estoy de tener que explicar todo tanto, dejen de ser tan boludos en fin) que combinados en forma correcta nos darán un rico, cremoso y buen campamento, estoy de acuerdo en que realmente quedó una larga guia, laaarga y complicada guía, pero que seria de la vida sin cosas largas y complicadas.


Primero que nada, un destino; poco podemos hacer sin un lugar a donde ir, para encontrar uno bueno, la primer condición es que quede lejos como la concha de su madre, y no lejos pero fácilmente accesible, a demás de lejos debe tener un buen trecho para ser caminado antes de llegar al punto en cuestión, debe tener, como medida estándar, entre 7 y 13 kms, aunque puede ser superior, más o menos como lo ilustra la imagen, y el lugar debe ser polvoriento (como lo muestra la otra imagen) o pantanoso, o con alguna otra huevadaque lo haga difícil de caminar, que cuando vayas por la mitad del trayecto te provoquen pensamientos como “y a mi quien carajo me manda a hacer estas cosas?” o “la próxima vez no vengo ni en pedo, esto es una mierda y quiero cagar a palos a todo”, esto es un signo de que todo va viento en popa.


El equipo; Cualquier tarea es difícil sin el equipo adecuado, a diferencia de esas, esta suele tomar más color cuando NO tenemos el equipo adecuado, aunque ciertas cosas son indispensables, por ejemplo un buen calzado, salvo que seas un rustico sin más, en ese caso es posible ir en zapatillas de lona gastadas. Otra cosa importante es la mochila, porque, no sean pelotudos, en ella vamos a llevar las cosas que necesitamos, la mochila debe ser cómoda, pero un poco odiosa, debe hacerte preguntar qué hiciste para mecer el castigo de llevarla, pero a la vez debe hacerte sentir que no la cambiarias por ninguna otra mochila que te puedan ofrecer. La relación tamaño mochila-mochilero es un tanto extraña, pueden verse algunos con mochilas proporcionales, y otros con mochilas que hasta doblan su tamaño, pero rara vez, y no es recomendable llevar una así, encontramos alguno con una más pequeña de lo que sería normal llevar para él, por supuesto que esto no es recomendable salvo que seas un rustico con desprecio por la vida, en cuyo caso si podrías llevar una mochila pequeña, con más cosas atadas afuera que acomodadas adentro.

Pasando a un segundo nivel de detalle en nuestro equipo, es el turno de la carpa y la bolsa de dormir, estas no son estrictamente necesarias, la bolsa puede ser reemplazada por alguna manta, y la carpa por nada, cualquier Juan Manuel Fangio de los campamentos debe poder dormir en la playa a bolsa pelada. Y de llevar una carpa esta debe tener, en lo posible, alguna varilla rota, o como mínimo alguna filtración de agua, que al llover haga que se nos cree un nuevo tipo medioambiente adentro cuya principal característica sean los pies mojados. Hablemos de la parrilla, es un elemento muy útil y necesario, debe ser robusta, complicada, incomoda y bastante chota de llevar, y si esta un poco sucia del asado anterior es mejor. Tal debe ser, que te den ganas de no llevarla y digas que no la vas a llevar, y no la llevas, para que otro miembro de la aventura no pueda con la idea de no tener parrilla y se sacrifique por todos llevándola.

Ahora sí, con un destino y mínimamente preparados ya podemos empezar a cocinar nuestro platillo campamento.

Es tiempo de comentar las actividades básicas, y los sucesos normales con los que nos podemos encontrar.


El lugar; Primero hay que llegar al lugar, llegar preferentemente reventado por la caminata, y con los procesos mentales impedidos tratar de vislumbrar cual sería el mejor lugar para instalar las cosas, puede que el lugar correcto tentadoramente parezca ser el lugar donde tiraste la mochila a penas entraste en la zona, pero no nos engañemos, tal lugar seria una cagada y mala idea, el lugar correcto debe estar cerca del agua, esto es útil sobre todo de noche, por si algún boludo se incendia o si hay que ir a recargar las botellas vacías, a demás el lugar debe estar protegido por árboles, y por más genial que se vea, no hay que plantar la carpa en el medio de un claro con pastito lindo, esto es importante por dos motivos, nos da refugio ante una eventual llovizna (si llueve mucho es la misma mierda casi), nos da sombra hasta el medio día y más, y nos protege un poco del viento, bueno, tres motivos, son tres motivos, no jodan.


El asentamiento; Una vez instalados automáticamente hay que ir a buscar leña para prender un desesperado fuego y poder empezar a cocinar el codiciado asado que viene en la mochila de alguno, (porque es casi una ley que la primera comida debe ser carne), no importa cuanta leña juntes si en tu grupo de colegas hay un rustico pirómano que quiere quemarla toda de noche, así que es mejor juntar la justa y necesaria momentáneamente. Después de comer el asado, el rustico quemará toda la leña, y a demás se puede ir un rato a la playa a ver el transito estelar antes de dormir, pero no sin haber dejado la puerta de la carpa abierta un rato para que se llene de bichos, para después tener que matarlos en condiciones de poca luminosidad, al fin y al cabo te acostas rendido, extrañas tu cama y sentís elementos extraños debajo de tu lugar, y los ronquidos de algún rustico con desprecio por la vida humana.

Si alguno es pescador, seguro se acostó con la idea de levantarse a penas antes de que salga el sol para ir a probar suerte al agua, sin embargo a esa hora recién dejaste de sentir la piedra que está debajo de tu carpa y que tenés clavada en el medio de la columna y decidís que mejor no vas a ir a pescar, pero un rato después se empiezan a sentir los dulces sonidos de los animalitos del bosque, pájaros de mierda en su mayoría, y ante la impotencia y la ganas de salir y arrasar con todo, pansas que tal vez sea mejor ir a pescar, damos por hecho que no vas a pescar nada y vas a volver con sueño a tu carpa ya sin importarte las canciones de las aves, y ahora es cuando vas a agradecer no haber puesto tu carpa a rayo de sol y que no se haya convertido en un horno inhabitable.


Las actividades diurnas; Ya es hora de levantarse y casi automáticamente hay que ir a buscar leña de nuevo, la justa y necesaria otra vez, porque todos tenemos hambre y queremos cocinar rápido, y no piensen que es para hacer humo y espantar a los bichos porque eso no funciona. Hagamos un pequeño aparatado para hablar de la comida, como antes mencioné, la primera debe ser carne, y todas las que le siguen suelen ser comidas que no te gustan, mezcladas con algún aderezo que si te gusta y que las hace levemente comestibles, y sopas quick frecuentemente; después de cocinar una de las comidas que no nos gustan, es hora de ir a la playa a disfrutar un poco el dia, Si hay otras personas acampando cerca debemos parecer desorganizados, lastimosos y faltos de recursos, para que nos regales cosas útiles, como pan, o comida, esta táctica es muy útil. Inútilmente puede tenerse el atrevimiento de proponer algunas magnificas actividades campamenteras, como construir barcos, chozas o cosas interesantes a los demás, porque generalmente el resto de la tripulación hará caso omiso a tus proposiciones, y vas a tener que atarte a las cosas comunes que se hacen, como lagartear y cagarse de calor en la playa o congelarse los huevos en el agua.

Después de la tarde de playa es hora de volver a la base y adivinen ¿Qué hay que buscar?.. leña, si, leña pero esta vez en cantidades industriales, una provisión para casi todo el resto de la estancia, aun teniendo en cuenta el gasto leñero del rustico. Esto se hace poniendo dos palos largos paralelos a forma de camilla, y sobre ellos palos mas pequeños, tantos como encontremos, los que hacen que el camino, con la camilla a cuesta, hasta la fogata sea tortuoso y te preguntes por qué te pasa esto a vos.


El retorno; El resto de todo no suele diferir mucho de lo ya comentado, salvo por alguna excursión por los alrededores, así llegamos al último día. Como no fuiste a pescar en ninguna de las otras mañanas, y ves que esta es tu última oportunidad le pones voluntad al hecho, tu columna ya se amoldo a la piedra debajo de tu carpa, y el canto de los pájaros ya paso a un segundo plano gracias a tu concentración mental, sin embargo es poco productivo porque vas a dormir poco y a pescar menos, así que pasamos a la última comida, que suele ser arroz, porque siempre sobra arroz, y juntamos todo, extrañamente la mochila debería ir mas vacía, porque ya nos comimos lo que había, pero hay que ordenarla mal, cosa que te quede un zapato clavado en la espalda y el otro colgando afuera porque te olvidaste de meterlo, y nos disponemos a caminar el sendero de vuelta a la ruta para poder volver a casa.

Una vez en la ruta hay cosas que son fijas, no hay casi sombra, así que el cerebro lentamente se va cociendo en su jugo, hay hormigas, no hay nada que hacer durante las 2 horas que va a tardar en pasar el colectivo, y eso de hacer dedo es un mito, es inútil, nadie te va a levantar si venís de campamento y haces dedo, pero no está demás intentarlo para pasar el tiempo.

Si después de todo eso volves a casa con ese gustito a tierra en la boca, con olor a humo y arena en los calzoncillos, y con la sensación de que en la puta vida mas quieras volver a ponerte esa mochila y mucho menos ver arroz con jurel, pero a las dos semanas estés organizando otro, entonces tu plato habrá sido un éxito para todos los comensales de campamentos.





1 comentario:

  1. Hola primero muy copado este post del campamento.
    Vos seguís mi blog LAS OCURRENTES AVENTURAS DE SANTIAGO SANDA que lo cerré y acá paso para dejarte mi nuevo blog que estoy subiendo historietas todos los días o cada 2 días si queres seguilo como al anterior, saludos !!

    http://historietaschiclosas.blogspot.com/

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